25 de agosto de 2013

     Convertir pretensiones posibles en deseos inalcanzables por culpa de nuestro arraigado pensamiento crítico incrustado en una idea que no acaba de convencernos.

          Buscándole sentido a todo, encontrarle sentido a lo que no tiene por qué tenerlo, salir, y quemar las experiencias con el mechero del olvido.
       
Sentir el frío del doloroso hinchazón que nos provocó el pensar.
Quizás no sea nada, pero quien sabe, puede que todo sea así.

10 de agosto de 2013


          Un fluir de incorrecciones y excesivas ganas de vivir es justo lo que nos distingue del resto del mutantes enloquecidos por abandonar aquellos estados de desesperación, es justo lo que nos hace ser como somos y demostrar que ansiamos vivir más o quizás menos. 
          Un fluir de incorrecciones y excesivas ganas de vivir es aquel punto de partida del cual salimos con una idea incrustada, idea que se transforma durante el transcurso del tiempo o que simplemente se queda en nada, depende del conjunto de sueños, ganas y deseos que conformen nuestra red mágica de recuerdos infinitos.
          Sin ese fluir de incorrecciones que nos provocan impulsos eléctricos cargados de amnesia, pero de una amnesia voluntaria, nosotros elegimos como si de una máquina se tratase, cada recuerdo. Y gracias a esas incorrecciones hoy en día alguno es capaz de vivir de acuerdo al límite de posibilidades que nos afectan, y esto lo digo tirando por lo bajo.
          Así pues, aumentemos nuestro fluir de incorrecciones y excesivas ganas de vivir.

8 de agosto de 2013


Mis pretensiones a deshora
y mis cábalas de plástico
me hablan de tus manos

Naufragamos en colchones 
burlamos el ruido
odiados cumplidos

Mentiras piadosas
que envuelven nuestro sábado
seremos cliché
a este paso.

Nuestro trato fue
y se marchó
aflojamos las manillas
aun nos quedan ratos.

Es cierto que nos quedan ratos, 
y ahogados entre respiraciones nos despertamos, 
engañando los silencios escapamos. 
Leemos las espaldas y te amanezco entre persianas.
Y nos quedamos, y nos valen nuestros metros. 
Pues era ese el trato, 
o somos nosotros, 
o eras tu y por eso yo. 
Se nos hace tarde, no somos los únicos implicados
cada vez son más, los raros
nosotros teñidos en excepción 
y acabados
siempre seremos esos dos trastornados
que huían de la ciudad,
esquivando permisos, vicios
es igual lo que pudiera pasar.

Es cierto que nos quedan ratos,
y matando nuestras fuerzas nos explotamos
nos convertimos en peregrinos
de aquella carretera infinita
será nuestro secreto
contaminando autopistas
con nuestros alientos intrigados
y allí nos quedamos, y nos valen nuestros metros.
Pues era ese el trato,
o somos nosotros,
o eras tu y por eso yo.

...

4 de agosto de 2013



Y si nos fumamos a medias el barrio de las letras de Madrid
aparcamos las miradas derrotadas
pues ellos se miran entre sí
y clavarnos nuestros cuerpos
amaneciendo en plazas vacías
en las que se juran verdades
en silencio y de mentira.

No somos nosotros
es la magia de las calles de Madrid.

Y hacía mucho tiempo que, pero vuelvo a estar, y he aprendido una nueva forma de mirar el mundo en todo este tiempo que a pesar de todas las...